Un postre rápido y muy rico a la par que calórico pero bueno, es un detalle sin importancia. El único secreto es que la horchata sea de calidad, no era mi caso, como me acuerdo cuando estuve desplazada unos meses por trabajo en Castellóny me iba a comprarla a granel, que delicia Y que rabiaaaaaaaa que ahora tengo que comprar botellas que son horchata porque lo pone en la etiqueta... en fin.
INGREDIENTES:
- 600 mls. de horchata
- ralladura de limón y naranja
- 4 cucharadas rasas de azúcar ( 2 para quemar por encima )
- 75 grs. de maizena.
- ralladura de limón y naranja
- 4 cucharadas rasas de azúcar ( 2 para quemar por encima )
- 75 grs. de maizena.
PREPARACIÓN:
Ponemos la mitad de la horchata al fuego con las ralladuras y dejamos a fuego muy muy lento unos 15/20 minutos para que tome sabor a los cítricos.
Añadimos dos cucharadas de azúcar y mezclamos. En un bol mezclamos la maizena con el resto de la horchata
Añadimos a la horchata infusionada batiendo con las varillas para que se mezcle todo muy bien.
Cocemos a fuego lento sin parar de remover hasta que notemos que empieza a espesar.
En ese momento vertemos en copas, vasitos, cuencos, etc y dejamos enfriar .
Cuando estén ya frías, espolvoreramos con el resto del azúcar .
Y quemamos con el soplete, hierro o con el grill a toda mecha en su defecto.